Y un día volvió

Tal vez escriba algo nuevo. Porque es lo que me queda.

Il Corvino ya no escribe,  y me alegraba los días con frases que me gustaba pensar que se me podían occurir a mí.
Nada que leer por acá, a lo mejor hojeo un libro buscando frases que me puedan rescatar.

La música, la popular, en general, una mierda. Así que nada que escuchar.
La televisión, lo de siempre, pero peor, hasta las cosas que me daban risa ya no están. O están menos.

El cine, lleno de súper heroes. Superstars. Te sientes superloca, supermal.




Hoy Charly García cumple 67 años.

Una canción de Charly siempre está.

Tiene un nuevo disco que ya no es tan nuevo,  Random, que no parece de él, porque él ya no parece él. Igual, me hace sonreír pensar que esta vivo, como pensar que la gente que me importa sigue viva, por facilista y estúpido que suene, yo también estoy vivo y bien.
Y entonces pienso que no importa mucho que la música popular sea una mierda, que el cine que vende sea una reverenda cagada y que no haya nada que me entretenga en la televisión.

Hay cosas que me hacen sonreír y mucho. El entretenimiento pop, en estos días, no es una de ellas, pero bueno, ya llegará la primavera.



Mientras tanto me queda hablar con gente que me hace reír. Le conté a mi viejo que habían instalado unos parlantes que ni se veían y me contestó que lo más probable es que no hubieran instalado nada y que me estuvieran agarrando de huevón haciéndome creer que eran invisibles.
Su respuesta rápida y con matices del mejor momento de Los Simpsons me alegraron bastante ese día. Me da ganas de escuchar una canción de Charly en esos parlantes invisibles. A lo mejor canción de 2 x 3.

No encuentro la magia en mi manera de actuar.

No quiero olvidarme de hablar.